La importancia de la Ferrari 250 GTO en Le Mans 1962 radicó en su desempeño excepcional. Durante esa edición de las 24 Horas de Le Mans, la 250 GTO logró una impresionante victoria en su clase, con la dupla de Pierre Noblet y Jean Guichet, -con el chasis 3443GT - llevándose el primer lugar y con David Piper y Graham Hill en el segundo -con el chasis 3705GT- para la categoría GT. Estos resultados no solo demostraron la capacidad de Ferrari para producir automóviles de carreras altamente competitivos, sino que también contribuyeron a consolidar su reputación como una de las marcas más prestigiosas y exitosas en el
automovilismo deportivo.
La victoria en Le Mans de 1962, junto con otros éxitos en importantes carreras de resistencia, consolidó la reputación de la Ferrari 250 GTO como uno de los mejores automóviles de carreras de la época y contribuyó en gran medida al mito que rodea a este modelo.
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Título: Ferrari 250 GTO en Le Mans 1962
Medida: 0.50m x 0.66 m
Técnica: Acrilico sobre algodón.
Autor: Agustin Pelaia aka Roadster
